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                       RECETAS de los Monasterios

Religiosas de Clausura - Hermanas Clarisas

    

INTRODUCCIÓN

 

Somos 3 alumnos del colegio Munabe situado en Loiu (Bizkaia). En la asignatura de religión nos propuso el profesor realizar un trabajo de investigación. A nuestro grupo se le ocurrió poner en formato de página web una serie de recetas que se hacen en algunos Monasterios de las Clarisas.

Para eso nos hemos servido de un libro base: Cocina monacal de las hermanas Clarisas. Coordinación de Javier Sagastizabal y las Hnas. Ana María y Esther del Monasterio de san Antonio de Padua, en Durango (Bizkaia). 4ª edición.

Pero lo primero era el investigar que son los Monasterios de clausura y para que hacen allí estas famosas recetas de cocina. Para obtener esos datos visitamos las navidades pasadas un Monasterio de Clarisas con ideas de hacerles una pequeña entrevista que nos ayudase a introducir este trabajo.

Para ambientar la entrevista nos gustaría situar primero el monasterio donde hemos estado. El actual emplazamiento del  monasterio en el alto de Artebakarra, en la antigua carretera que une Bilbao con Munguía.  Es el cuarto Monasterio que ocupan las Clarisas a lo largo de sus 627 años de existencia. Según el Informe de 1646, que Fray Pedro de Loibe envía al Comisario General de los Franciscanos, "la primera fundación fue en un palacio, que está junto al Convento de San Mamés fundado en 1450 por los Franciscanos ha más de 280 años". Por lo tanto, el grupo inicial de religiosas se formó hacia 1366.

Al entrar en el Monasterio nos dirigimos a una sala en donde nos recibieron dos religiosas que se encontraban detrás de  unas rejas que separan la clausura de la zona de visitas.

 La primera pregunta que les hicimos fue que importancia tenía para la Iglesia la vida contemplativa y nos respondieron que para ellas, para Adriana y Amada, la vida contemplativa es la raíz, el corazón. Nos comentaron la pérdida de sensibilidad entorno a estos temas y que la vida va encaminada a lo práctico solamente. Ven complicada la búsqueda de un lenguaje adecuado para comprender la prevalencia del ser ante el hacer y encontrar signos para hacerse entender (a pesar de eso, nosotros las entendimos muy bien)

 A continuación les preguntamos acerca de la importancia que tenían ellas, las monjas de clausura, en la vida de la Iglesia y nos dijeron que su misión es hacer ver al mundo que Dios es lo más importante para el hombre.

 Por último, pero no menos importante, les hicimos una pregunta que era fundamental para nuestro trabajo: ¿cuál era la finalidad de hacer pastas? Adriana y Amada nos dijeron que los dulces que fabrican sirven para poder mantener económicamente el monasterio. Pero además su trabajo tiene un valor muy especial, viven de sus propias manos, siguiendo el ejemplo de Santa Clara que manifestó el vivir de Dios, es decir la Providencia les daba lo suficiente para vivir. Por otro lado, el trabajo es una gracia, no una obligación para ganarse la vida y lo que no podrían conseguir se lo aportaría Dios. Por último mencionaron la Obra Creadora de Dios, en otras palabras la mejora del mundo.